En este artículo vamos a analizar los materiales con que todo opositor debe contar. En esa batalla contra los temarios, vale la pena tomarse la molestia de procurarse buenas herramientas que ayuden en la tarea, porque cualquier posible ventaja es bienvenida.
Hablemos de las armas del guerrero.
Son muchas las horas que se dedican a estudiar apuntes, subrayar, hacer resúmenes, esquemas, cuadros, responder a test y corregirlos… Mejor hacerlo de un modo que nos permita optimizar tanto la actividad como el tiempo invertido. Por esa razón y basándonos en años de experiencia, hemos hecho una pequeña selección de algunos de los artículos que pueden ayudar a los opositores en su estudio.
Archivadores
Estudiar una oposición provoca un increíble crecimiento de papeles alrededor del estudiante. Si no quieres perderte en esa selva de apuntes, notas, esquemas, cuadros y resúmenes, mejor los archivas de forma sistemática y organizada.
Absolutamente recomendable usar carpetas en A4 con cierre de palanca, que garantiza la fuerza necesaria para que los papeles no se rebelen y huyan de su confinamiento.
Diferentes colores pueden servirnos para identificar materias, separar temario y psicotécnicos, parte general de parte específica…
Separadores
Una carpeta sin separadores no es mejor que un cajón desordenado. Si usas carpetas, necesitas organizar la información que contienen y poder acceder a ella de forma rápida.
Los separadores de colores son la opción más extendida y popular.
Personalmente prefiero algo más funcional: uso separadores numerados, e identifico así cada número del tema de la oposición que archivo.
En cualquier caso, no olvides crear un índice en la portada de la carpeta.
Fundas de plástico
Hay cosas que deben protegerse del riesgo de vertidos de café, restos de bocadillo, tinta inoportuna… Ese esquema tan currado no puede desaparecer porque se vuelque la botella de agua. No señor.
Guarda tus más preciadas posesiones en fundas de plástico que podrás meter en carpetas y tenerlas siempre localizadas.
Máquina de hacer agujeros
Los folios deben entrar en las carpetas de alguna manera, y la mejor manera es hacerles los agujeros precisos con una buena máquina, que tenga una guía para dejarlos siempre en la misma posición y asegurarnos la uniformidad de los documentos archivados.
No hace falta volverse loco con la cantidad de papel que puedan perforar la vez: con unas 10 o 15 hojas por vez es suficiente. Los colores son una elección personal, pero recomendamos desde aquí tratar de guardar cierta armonía en el espacio de estudio: todo ayuda.
Organizadores de escritorio
Una mesa caótica te hará perder el tiempo porque tendrás que buscar dónde has puesto el lápiz, o los rotuladores de colores, o dónde hay un condenado clip… Usa algún elemento que te ayude a mantener la mesa ordenada y despejada para concentrarte en estudiar y no dedicarte a jugar a “¿Dónde está Wally?” con la goma.
Un imán para clips no tiene por qué ser una caja fea y vulgar. Puedes dejar tus clips pegados en una figura de gato y darle algo de vida a una mesa de estudio en la que pasarás muchas horas.
Si lo prefieres, un portalápices que imita a un cactus puede servirte para tener localizados los clips y dar color a esa mesa tan llena de papeles.
Atril
No cargues con ese tocho en las manos: las necesitas libres para apuntar, subrayar, hacerte el esquema, revisar tus respuestas al test…
Pon el libro en el atril, a la altura que mejor se adapte a tus ojos y sigue trabajando de forma ágil y sin que tu espalda sufra. Prefiero madera, por su tacto, ligereza y resistencia. Recomiendo que su diseño permita no menos de cuatro posiciones diferentes, regulando así la altura e inclinación del texto para tu comodidad. Las pestañas de la base impiden que la página pase sola mientras no la sujetas.
Perfecto para hacer esquemas.
Rotuladores
Subrayar es necesario para destacar las ideas clave en un texto, y usar diferentes colores puede ayudarnos a crear nuestras propias reglas mnemotécnicas.
Hay a quien le funciona convertir una página en un collage de colores, y hay quien prefiere un estilo de subrayado telegráfico, así que cada uno debe encontrar su propio estilo.
Pero la verdad es que funciona lo de destacar el texto a estudiar.
Notas adhesivas
Una buena manera de dejarte a ti mismo recordatorios, explicar algo con tus propias palabras, organizar tareas o lo que se te ocurra es usar estas prácticas hojitas adhesivas.
Las hay en diferentes medidas y colores, por si eres uno de esos que asociamos materias y colores.
Incluso las puedes encontrar en formatos mini para actuar como separadores o señaladores y personalizar tus materiales de estudio con ese toque personal que ayude a tu cerebro a encontrar ágilmente la información.
Y las hay reutilizables para que sirvan de marcapáginas.
Iluminación
Para estudiar bien hay que ver bien, y para eso es vital contar con una buena iluminación. Como no siempre es posible contar con la deseable luz solar, hacen falta sustitutos aceptables.
Recomendamos iluminación basada en tecnología LED por su bajo consumo, baja emisión de calor y calidad de luz, sin fluctuaciones ni temblores.
Es aconsejable contar con una luz potente y clara que proporcione unos 900 lúmenes o más: menos de 700 es inaceptable por insuficiente ya que fatigaría la vista al tener que esforzarnos por leer con una luz escasa.
Personalmente, recomiendo luz neutra porque es la más parecida a la luz solar; en su defecto, luz blanca pero nunca amarilla porque me parece mortecina aunque sea potente. Desde luego, nada de luces de colores: eso queda para la verbena.
Esta lámpara permite usar bombillas LED de la potencia que se desee. Recomendamos usar bombillas LED de unos 20W, que son unos 950 lúmenes, pero esta lámpara permite hasta un máximo de 100W, lo que supera los 6.000 lúmenes: cuidado en tal caso, no aterricen aviones en tu cuarto de estudio.
GRACIAS, TODA AYUDA Y SGERENCIA ES POCA PARA LOS OPOSITORES.
Muchas gracias Receba!!
Esa esa la idea: que toda piedra sirva para hacer pared.
Un saludo y muchas fuerzas en el estudio!!