El Gobierno responde solidariamente en su gestión política ante el Congreso de los Diputados.
El Artículo 108 de la Constitución Española de 1978 aborda el tema de la responsabilidad política del Gobierno ante el Congreso de los Diputados. Este principio es fundamental en un sistema democrático.
En términos sencillos, significa que el Gobierno, es decir, aquellos que toman decisiones importantes que afectan al país, debe rendir cuentas ante el Congreso, el cual está compuesto por representantes del pueblo que han sido elegidos por el voto popular. Esto garantiza que el Gobierno actúe en el mejor interés de los ciudadanos y es consciente de que debe responder ante un grupo de supervisión de sus acciones y decisiones.
Bajo este artículo, el Congreso tiene el poder de presentar una moción de censura en contra del Gobierno si considera que este no está cumpliendo con sus obligaciones o si ha tomado decisiones perjudiciales para el bienestar del país. Esto no es algo que se haga a la ligera, ya que puede llevar a la caída del Gobierno y a la convocatoria de elecciones anticipadas, pero sirve como recordatorio de que los gobernantes deben responder por sus acciones ante los representantes del pueblo.
Este aspecto de la Constitución también contribuye a mantener un equilibrio de poder entre los distintos órganos del Estado, asegurando que ninguno tenga un control absoluto y facilitando así la transparencia y la buena gobernanza. En resumen, el Artículo 108 es fundamental para garantizar la responsabilidad política del Gobierno y mantener un sistema democrático y equilibrado en España.